Refugio. Cobijo Interior. Donde ahora nacen flores. Lo vasto se cubrirá. Se podrá caminar con pies mullidos, respirando delicia, impulsado hacia arriba y delante, siempre con y sin embargo falto de rumbo...
Se construyen bancos alados de la misma esperanza, alegres senderos serpentean sin pretensión de sentido, hasta la lluvia que no está difumina los contornos de la realidad que no deja de ser.
Tal certidumbre acaricia mi pecho que la conciencia estalla. Luz.
Lo que ahora es, antes dejó de pretender ser. Vuelo.
Caminanda con ímpetu. No impuro de mancha en el con razón.
Respirar por la metáfora. Cierto es el lúcido de coraza, no sin tentar la brillante oscuridad.
Pluma de vida y artificio. Dispenso a los de extintas inacciones.
Llueve a lo lejos en otros desiertos que podrían ser refugio.
