Un plato que no combinaba para nada



Nos ofrecen las cosas pidiendo un valor cuando lo que se nos ofrece no se corresponde con ese precio. Me rebela que continuamente se intente dar gato por liebre por si acaso cuela.  
No es necesario esforzarse y ofrecer un producto de calidad si la gente consume cualquier cosa que le pongas con tal de llenar el buche. Cero inconformismo. Y así seguimos, tragando lo que nos echen, que si alimenta ¿para que más? Si en algún momento aquello era mejor ya ni lo recordamos, y como casi todos te ofrecen lo mismo no merece la pena esforzarse en buscar otra cosa.

No pasa nada, luego pasará por ahí un chicote cualquiera y preguntará: -¿Cómo es que usáis tanto el microondas? Estas patatas son de ayer ¿no? Esta pechuga de pollo es una miseria y por no hablar de la supuesta ensalada o guarnición, que para que sea eso hay que echarle imaginación. 

Buche Abierto: (Introduzca lo que desee) (Yo no me voy a quejar) (Y si en algún momento lo hago no será por nada que valga la pena sino por estupideces)(No hay de qué)

No hay comentarios:

Publicar un comentario